LO QUE NOS IMPIDE SEGUIR AVANZANDO...




(Extractado del libro)
Las vacas no existen en la realidad, sólo en el pensamiento. En otras palabras, las vacas no son realidades físicas sino ideas que albergas en tu mente. Si tú crees que tu vaca es tu esposo, o tu padre u otra persona, estás equivocado/a.

Click sobre el siguiente enlace para ir al libro: La Vaca-Dr. Camilo Cruz

Tu vaca no es esa persona, tu vaca es una idea o un concepto que puedas tener sobre esta persona. Digo esto, porque en una conferencia, una señora se acercó a mí y me dijo: “Dr. Cruz ¡mi vaca es mi esposo!” Yo le pregunté el por qué de tal afirmación. Ella me respondió: “Yo no he podido hacer nada con mi vida, porque mi esposo no me apoya”. Así que le respondí: Tu vaca no es tu esposo, tu vaca es creer que sin el apoyo de tu esposo no serás capaz de hacer algo con tu vida, lo cual es absurdo .¿Si ves? Esta idea es una vaca justificadora que no sólo te provee con una excelente excusa para no hacer nada, sino que te sitúa en el papel de víctima, como mencionábamos anteriormente. Digo que es una vaca, porque si lo que decidas hacer con tu vida, depende de que cuentes o no con el apoyo de otras personas, pues vas a lograr muy poco.
Una vida libre de vacas
Cuando matas tus vacas aceptas la totalidad de la responsabilidad por tu éxito. Te conviertes en arquitecto de tu propio destino. Querer triunfar, tener buenas intenciones y contar con grandes sueños, por si solo no te conducirá al éxito. Por cada gran idea o invención que terminó por cambiar la historia de la humanidad, han habido miles de ideas que nunca se materializaron, porque aquellos que las concibieron y quizás desarrollaron un plan para su logro, nunca pusieron ese plan en movimiento. Esa fue su vaca: La falta de acción. Así que echa a rodar tus planes. No te pares a pensar en todos los problemas que puedan surgir. Muchas personas planean y ensayan su propio fracaso al malgastar una gran cantidad de tiempo anticipando lo peor. Los grandes triunfadores aceptan los riesgos que generalmente acompañan la búsqueda del éxito. Esa valentía, ese arranque, ese entendimiento de que todo gran sueño demanda acción inmediata, es lo que distingue al ganador del perdedor. En el juego de la vida o eres jugador o eres espectador. Los triunfadores son más que simples participantes, ellos están totalmente comprometidos con sus objetivos. Ellos no buscan excusas, ya que saben que sus amigos no las necesitan y sus enemigos no las creerán de todas maneras. Cualquiera que sea tu vaca, existe una forma de matarla: La acción. No permitas que la vida te pase de largo, libérate de tus vacas y cuídate de no engrosar las filas de aquellos que en la postrimería de sus vidas solo pueden recordar con remordimiento y tristeza todas las oportunidades perdidas. Encara todo nuevo reto; desafía las normas convencionales; rompe las reglas del juego. Las preocupaciones, los temores, los miedos, y las dudas no son más que vacas que tratan de robarte tus sueños y mantenerte atado a una vida de mediocridad. Te invito a que aceptes el reto de vivir una vida libre de vacas, una vida donde todo sueño es posible y los únicos límites son aquellos que tú mismo impongas. Acepta este reto y te aseguro que muy pronto tú y yo nos veremos en la cumbre del éxito.

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1 comentario:

  1. El cuento de la vaca mee parece una magnífica parábola para inculcar a la gente importante del pensamiento positivo. El inmovilismo es el freno de la evolución.

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